Raskólnikov es un joven de veintitrés años que acaba de terminar sus estudios y que malvive en una buhardilla de San Petersburgo.
A pesar de su pobreza, es apuesto y elegante y de una gran inteligencia.
Desde el principio de la novela acaricia el plan de robar y matar a una prestamista, una anciana ciertamente desalmada y mezquina.
Originalmente titulada Los borrachos, con el propósito de desarrollar el tema del alcoholismo en la familia, Crimen y castigo –que aquí ofrecemos en una nueva traducción de Fernando Otero Macías fue escrita por Dostoievski en una época de deudas y penurias muy particular.
Hoy es, incuestionablemente, su obra más conocida.