Las montañas, esas joyas naturales que debiéramos atesorar, albergan el 15% de la población mundial, dan cobijo a un cuarto de los animales y plantas terrestres y  suministran agua dulce para más de la mitad de la humanidad. Su conservación resulta clave, sin embargo, se encuentran fuertemente amenazadas por el cambio climático y la sobreexplotación.

Las montañas son importantes para los jóvenes

Este día internacional recalca las dificultades que afrontan los jóvenes que viven en la montaña y su único final posible: la emigración,  la cual acarrea a su vez el abandono de la agricultura, la degradación del suelo y la pérdida de valores y tradiciones culturales.


Cinco montañas no solo es una obra narrativa de carácter autobiográfico de César Pérez de Tudela.  En ella el autor pretende, a través de la figura del explorador solitario que es él mismo, desvelar la interrogante eterna del destino,  de la vida, de los hombres, en el escenario insuperable de los grandes confines.  Y es tal vez en la soledad de un escalador –debido a la situación de extremo peligro y a la magnitud de las fuerzas naturales con las que se enfrenta–  donde se encuentra una de las máximas expresiones de este sentimiento.

La soledad constituye pues el eje temático de este libro que dedica un capítulo a los grandes escaladores que se aventuraron a las cimas más inaccesibles sin más compañía que la de sus propios miedos por vencer.
Desde Petrarca hasta Messner, nos encontraremos con numerosos puntos de vista,  citas y semblanzas que intentan acercarnos al porqué de esta arriesgada afición.

A continuación, el autor narra sus expediciones solitarias al Aconcagua, Annapurna, McKinley, Monte Olivia y Ruwenzori.  En esta crónica, llena de tensión y dramatismo, el alpinismo no cuenta como hecho deportivo.  Bajo la capa narrativa subyace siempre la intensa vivencia que la aventura suscita y la experiencia de los límites del esfuerzo humano.  Durante su peregrinaje por las montañas de distintas zonas de la Tierra, el explorador va desnudándose, descubriéndose a sí mismo,  ayudado por la contemplación del grandioso paisaje.  En los momentos difíciles, colmado de necesidades y añoranzas, llegan las más reveladoras reflexiones, y con ellas,  el descubrimiento del alpinismo trascendente.

Abogado de profesión y doctor en Ciencias de la Información, César Pérez de Tudela dedica su tiempo libre a la montaña desde hace 40 años.
Su currículum como explorador alpino y geográfico abarca numerosas expediciones solitarias al McKinley en Alaska y al Annapurna,  la escalada invernal del Naranjo de Bulnes y las expediciones al Everest organizadas por la Universidad Complutense.

Como conferenciante y cronista alpino, desarrolló en la España de los 70 una innovadora campaña de promoción y divulgación del montañismo a través de la televisión, radio y prensa, convirtiendo esta afición minoritaria en un deporte popularmente practicado.

Monterapia. Cuesta arriba se piensa mejor.

«La montaña tiene mucho más en común con la vida de lo que crees. Suelo decir que un día en ella equivale a dos en la ciudad, por lo menos.  Incluso una naranja o un bocadillo saben diferente. Desde finales de los 70 me acerco siempre que puedo a esas mágicas cumbres,  y cada vez que lo hago la montaña –alta o baja– me regala lecciones para mi vida personal.  Lecciones sobre la amistad, la soledad, la confianza, las prisas, la tecnología…»

A través de sus propias experiencias, Juanjo Garbizu nos transporta a las altas cumbres, donde las prioridades cambian y se suceden  vivencias inolvidables. Conoceremos situaciones en las que conceptos como materialismo y competetitividad se relativizan,  ofreciéndonos enseñanzas para llevarnos a casa en nuestra mochila. Acércate a los valores que la montaña transmite y conquista la cumbre más difícil… la de tu propia vida.

Slow Mountain. Porque el tiempo en la montaña se detiene.

El acelerado ritmo de vida actual parece haberse trasladado también hasta las cimas del mundo, que se están convirtiendo en foco de competitividad  en muchos sentidos. Juanjo Garbizu prefiere, en cambio, subir al monte para vivir a un ritmo más calmado y de esta forma hacer posible momentos
en que el tiempo deje de ser importante (por ello asciende sin reloj). Así disfruta de todo lo que le ofrece el paisaje,  agudiza sus sentidos con la observación de la naturaleza y vive con intensidad la plenitud de estímulos que sólo pueden ofrecernos las montañas.  Esto es la Slow Mountain, la montaña a ritmo tranquilo que Garbizu reivindica en un libro que también es un manifiesto destinado a promover  un movimiento para recuperar el espíritu original del montañismo y el excursionismo.

Juanjo Garbizu

La pasión por la montaña ha llevado a Juanjo Garbizu (Donostia, 1961) a ascender a numerosas cumbres del País Vasco, los Pirineos y los Alpes,  y a adentrarse por cimas lejanas y míticas como el Kilimanjaro, en África, o el Aconcagua, en Sudamérica.
Uniendo esta gran afición a su experiencia profesional como creativo publicitario decidió crear una web personal, mendivideo.com,  en la que podemos ver más de 250 vídeos de montaña grabados por él mismo.